Propuesta busca requerir prueba de drogas para estampillas de comida
MILWAUKEE, Wis. (TELEMUNDO WI) – El Gobernador Scott Walker quiere convertir a Wisconsin en el primer estado en administrar la prueba de drogas a los solicitantes de las estampillas de comida.
Varios otros estados han tratado hacer lo mismo pero ha sido rechazado por el gobierno federal o lo han encontrado ser inconstitucional.
Es un tema polémico y una organización que está en contra de la propuesta teme que podría ser perjudicial para muchas familias locales.
Cada mes Hunger Task Force sirve a 35,000 familias para sus despensas de comida y más de 50,000 familias a través de sus cocinas de comida.
“Es triste que se opine que porque uno es pobre tiene un problema de drogas”, dice Imelda Roman, representante de Hunger Task Force.
Roman trabaja para la organización identificando las necesidades dentro de la comunidad y encontrando maneras para mejor ayudar a las familias, muchas de las cuales serán afectadas si el plan del gobernador es aprobado.
“Le ley federal ya estipula las reglas que se deben de seguir para el programa de estampillas de comida”, dice Roman. “Es inconstitucional porque la constitución garantiza que uno no puede ser rebuscado sin pruebas”.
El plan fue aprobado hace dos años pero ninguna acción fue tomada por un conflicto con las reglas federales que prohíben a los estados imponer criterios de elegibilidad. En el 2015, Walker presentó una demanda federal buscando la aprobación para el programa, pero fue rechazado por la administración del entonces presidente Barack Obama.
El año pasado, Walker le pidió lo mismo a la administración del presidente electo Donald Trump y aunque no ha recibido una respuesta, Walker sigue con su plan.
“El uso de nuestros impuestos para esto ha sido comprobado en por lo menos cuatro otros estados que no da resultados”, dice Roman. “La cantidad que se gasta no ha surgido más que 1.5% que tienen un problema de drogas”.
El banco de alimentos no cree que el problema sean las drogas sino los salarios bajos.
“El 80% aproximadamente, ya tienen trabajos y reciben estampillas de comida porque no les rinde lo que reciben en el trabajo”, dice Roman. “Personas de color y personas minoritarias desafortunadamente sienten el golpe más que otros grupos”.
La legislación estatal ahora tiene cuatro meses para revisar la regla. Esto podría tomar hasta otro año después de ser aprobado para que empiecen las pruebas para aplicantes.